Día Internacional del Trabajador
Ante un nuevo 1° de mayo, el MPR Quebracho estará conmemorando el día de los trabajadores en cada uno de sus centros populares a lo largo y ancho del país.
Los diversos actos convocados por distintas corrientes políticas en la Capital Federal no hacen otra cosa que exponer crudamente el estado de dispersión y sectarismo que aún se padece en las corrientes populares.
Por ello y porque nuestra militancia no es comparsa de ningún acto electoral velado, no estaremos en ninguno de los actos que se realizarán en la Capital Federal.
La memoria también es resistencia
El primero de mayo es el día internacional de los trabajadores.
La fecha fue elegida en homenaje a los obreros asesinados en Chicago a principios del siglo XIX, y simboliza la lucha de la clase obrera contra la barbarie capitalista.
Desde finales del siglo XIX el 1° de mayo es conmemorado en nuestra patria en honor a los mártires de Chicago y a los propios que a lo largo fueron abandonados en el camino de la lucha y la dignidad contra la explotación.
Desde sus orígenes, la clase trabajadora argentina demostró su ímpetu y combatividad.
Conducidos principalmente por anarquistas, socialistas y comunistas, los trabajadores
fueron organizándose y ganando sus primeros derechos. Y las clases dominantes no ahorraron sangre para combatirlos.
La Semana Roja y la Semana Trágica, la Patagonia Trágica y La Forestal son claros ejemplos de ello.Pero a pesar de estos golpes la lucha continuó.
Los trabajadores buscaron nuevas formas de organización, otras banderas políticas y siguieron el combate contra la explotación. Claro ejemplo de ello es el 17 de octubre de 1945. Cuando la clase trabajadora irrumpe en la escena histórica con viejos principios, pero sumando una nueva conciencia nacional.
El golpe gorila de 1955 la pone a prueba de nuevo. Y desde la clandestinidad se arma la resistencia contra los planes oligárquicos escribiendo paginas de gloria como la del frigorífico Lisandro de la Torre por ejemplo.
Con el Cordobazo la clase trabajadora hiere de muerte a la dictadura de Onganía y abre el proceso hacia el retorno de Perón.
Constituyéndose en protagonista central de las luchas revolucionaria de los 70 tras el golpe de estado de 1976 los trabajadores siguieron protagonizando trascendentes jornadas de lucha como los paros nacionales del 27 de abril de 1979, del 22 de julio de 1981 y del 30 demarzo de 1982.
Tras el asesinato por parte de la dictadura de los cuadros más claros, el movimiento siguió dando pelea. Protagonizando la resistencia contra el gobierno entreguista de Alfonsín, y en menor medida, debido a la traición de una parte importante de la dirigencia sindical, contra el gobierno de Menem.
En la década del 90, además de la destrucción del aparato industrial, llegaron las teorías posmodernistas que daban por muerta el papel de la clase obrera en la historia sin embargo, contra los agoreros y derrotistas, los trabajadores parecen de nuevo en las calles y en las luchas de los trabajadores desocupados. Los piqueteros vinieron a plantear que la historia no murió, que el combate contra la explotación sigue, y que la construcción de una sociedad justa es posible.
Debemos seguir en ese camino, organizando a los trabajadores ocupados y desocupados. Debemos seguir luchando por un modelo de sindicalismo democrático y combativo, que levante y apoye todos los conflictos sociales. Debemos seguir por la senda de la justicia social, en el camino del socialismo.
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